Los documentos iluminan la Historia. La luz de los archivos cae sobre los acontecimientos dando vida y textura a las sombras del pasado, rellenando los huecos de la memoria y certificando las crónicas. Pero la Historia no está compuesta solo de grandes hechos, no solo de revoluciones o descubrimientos, no solo de gestas o invenciones novedosas. La Historia de los hombres es también la descripción de los ritos y las costumbres de los pueblos, el relato del día a día, de la rutina del trabajo y del ocio, el ciclo de las cosechas y la celebración de las fiestas.

La Navidad, presente desde la era de Constantino I, es la fiesta por excelencia del mundo Cristiano. Austera y profunda en su origen, la exaltación del nacimiento de Jesús ha sido una bocanada de felicidad en tiempos de sufrimiento: luz en las tinieblas, remanso de paz en medio de la guerra.

 Y en el transcurso de todo, omnipresente y silencioso, está el Archivo Municipal de Málaga con sus documentos, sus fotografías, sus carteles y su prensa, dando de fe del desarrollo social, de la evolución urbana y ciudadana, de la metamorfosis histórica que, con sus luces y sombras, ha cambiado la miseria por la suntuosidad, el llanto por la risa y el desamparo por la seguridad.

Esta es la Navidad contada por el Archivo Municipal.